Otra mona de Pascua

A este paso, voy a batir el récord del blog menos actualizado del mundo. Casi un año sin publicar, siempre igual. Pero esta vez, al menos, publico a tiempo para que esta tarde os pongáis manos a la obra para poder tener esta mona de Pascua lista para mañana. Como siempre, el único requisito que le exijo a mi mona es que lleve una considerable cantidad de chocolate. A partir de aquí, yo ya le llamo mona. Habiendo como hay tantos tipos, digo yo que no vendrá de una más.

La receta es un mix de tres recetas diferentes de Peggy Porschen. Bizcocho de chocolate blanco, relleno de buttercream de chocolate que queda como una especie de trufa y cobertura de ganache de chocolate negro. Un mix que nos da una tarta de tres chocolates exquisita. Si no tenéis ganas de hacer el relleno, podéis perfectamente rellenarla con mermelada de fresa y os quedará igual de rica. 

MONA DE PASCUA DE TRES CHOCOLATES

Ingredientes:

 Para el bizcocho:

• 125 gr de chocolate blanco, en trozos pequeños
• 170 ml de leche
• 60 gr de azúcar moreno (si tenéis, usad azúcar moreno claro)
• 225 gr de azúcar (en la receta original usa caster sugar, si no tenéis, podéis usar normal)
• 105 gr de mantequilla, a temperatura ambiente
• 2 huevos, a temperatura ambiente
• 215 gr de harina
• 1 cucharadita (teaspoon) de levadura química

 Para el relleno:

• 100 gr de queso crema (tipo Philadelphia)
• 100 gr de mantequilla
• 225 gr de icing sugar (o azúcar glass, pero es preferible el icing sugar que es más fino)
• 150 gr de ganache de chocolate 

Para el ganache de chocolate de cobertura (y parte del relleno):

• 420 gr de chocolate (mínimo 55% cacao)
• 350 ml de nata para montar
• 30 gr de glucosa (opcional)

Empezamos haciendo el ganache de chocolate. Troceamos el chocolate, añadimos la glucosa. En un cazo, calentamos la nata hasta que hierva y la vertemos sobre el chocolate. Removemos bien hasta que el chocolate se haya derretido completamente y tengamos una mezcla homogénea. Reservamos.

Seguimos preparando el bizcocho. Precalentamos el horno a 160º.  En un cazo ponemos el chocolate, la leche, el azúcar moreno y 85 gr del azúcar blanco. Lo llevamos a hervir, removiendo con una espátula hasta que esté bien mezclado.
Ponemos la mantequilla y el resto del azúcar en la batidora y mezclamos bien. Añadimos los huevos ligeramente batidos. Tamizamos la harina junto con la levadura y la añadimos en dos veces a la mezcla de mantequilla y huevos. Luego, mientras seguimos batiendo, añadimos la mezcla de chocolate poco a poco. Repartimos la mezcla en 3 moldes de 15 cm engrasados previamente y horneamos durante 25-30 minutos. Sacamos del horno y los dejamos reposar 30 minutos. Desmoldamos y dejamos enfriar completamente. Si podemos, hacemos los bizcochos la noche anterior y los dejamos reposar en la nevera durante la noche envueltos en papel film. Si los hacemos el mismo día, esperar lo máximo que podamos para nivelarlos, ya que recién horneados estos bizcochos son bastante frágiles.

Seguimos haciendo el relleno. En un bol, batimos el queso hasta que esté bien cremoso. En otro bol batimos la mantequilla y el azúcar hasta que blanquee. Añadimos poco a poco el ganache. Finalmente, añadimos el queso en tres tandas. Dejamos enfriar un poco para que adquiera un poco de consistencia.

Para montar la tarta, nivelamos los tres bizcochos y usamos el buttercream de chocolate para rellenar. Dejamos enfriar en la nevera. Cubrimos con una primera capa de ganache toda la tarta y la alisamos un poco (no hacer falta que quede perfecta): La volvemos a dejar enfriar un ratito. Calentamos el ganache sobrante hasta que tenga una textura más líquida. Ponemos la tarta sobre una rejilla con una bandeja debajo y tiramos el ganache por encima, vigilando que los laterales queden cubiertos. Volvemos a enfriar la tarta para que endurezca un poco el ganache. Es preferible guardar la tarta en la nevera y sacarla un o dos horas antes de tomarla para que pierda el frío.